El crimen es un mensaje es para muchos, y no solo, como se ha sugerido, para la jefa de Gobierno. También es para Sheinbaum, para Harfuch, para López Obrador y para toda la camada de dirigentes morenistas que pactaron sus victorias electorales con criminales
REDACCIÓN VOCERO
CDMX.- El pasado 20 de mayo 2025, a la hora en que se transmitía la conferencia del pueblo de Claudia Sheinbaum, donde se encontraba reunido todo el gabinete de seguridad, se le dio el aviso a la mandataria que en ese momento fueron asesinados a tiros dos servidores públicos colaboradores de la jefa de Gobierno Clara Brugada. El crimen fue contra su secretaria particular Ximena Guzmán y José Muñoz, quien fungía de enlace en el sector de seguridad de la capital con el Ejército y la Secretaría de Seguridad. El criminal huyó corriendo.
El periodista Carlos Jiménez reveló que el presunto asesino de los colaboradores de Clara Brugada ya había estado en el lugar del asesinato el 14 de mayo, vestido de la misma manera: con un chaleco fosforescente y un casco, fingiendo hacer algo en la calle, sobre Tlalpan.
Según su investigación, ese día no actuó, pero sí regresó después para ejecutar el ataque, esperando a que ambas víctimas estuvieran juntas. Tras revisar cientos de imágenes, se confirmó que el sicario llevaba días vigilándolos, lo que refuerza la hipótesis de un ataque planeado con precisión y dirigido específicamente a ambos funcionarios, quienes se quedaban de ver afuera del Metro Xola, en la calzada de Tlalpan para irse juntos a su oficina.
En entrevista con José Cárdenas de Grupo Fórmula, el periodista comentó que el asesino ya estaba cazando a los funcionarios de Brugada, pues el 14 de mayo se le vio en el mismo lugar donde llegó Ximena Guzmán, pero José Muñoz no llegó, es decir no llegó por el bajo puente, pues ella lo esperaba ahí para trasladarse juntos a la oficina de la jefa de Gobierno.
De acuerdo con los videos, el asesino se puso casi enfrente de la camioneta Audi que manejaba Ximena, quien se estacionó sobre Tlalpan a la altura de Xola, y en cuanto el coordinador de asesores José Muñoz subió al auto, les disparó a ambos, pero fue la funcionaria quien recibió más tiros a la altura de su rostro, a través del parabrisas del auto.
Después el asesino se fue corriendo y dobló en la equina por calles de la colonia La Moderna, donde ya lo esperaba un auto que luego fue abandonado para abordar una motocicleta con rumbo a Iztapalapa.
Justo en la conferencia mañanera de ese día, denominado los martes de seguridad, se daba a conocer que los homicidios dolosos se redujeron en 60 por ciento, cifras que ahí informan que al parecer no coinciden con la realidad.
Ese asesinato agrega un elemento turbio al ambiente descompuesto en el país: Ricardo Pascoe
El político mexicano y ex embajador en Cuba,Ricardo Pascoe comentó que ese crimen en plena avenida de la Ciudad de México agregó un elemento turbio y oscuro al ambiente de por sí descompuesto del país. La crisis política y la crispación social que se vive es producto de las malas decisiones del movimiento que gobierna. La combinación letal de arrogancia e ignorancia está creando la tormenta perfecta para que el país derive hacia una situación de caos incontrolable.
En su colaboración de hoy para El Heraldo, Pascoe considera que.. «Toda esta situación de repente llega a un punto de ruptura con el asesinato de Ximena y José. El mensaje es para muchos, y no solo, como se ha sugerido, para la jefa de Gobierno. También es para Sheinbaum, para Harfuch, para López Obrador y para toda la camada de dirigentes morenistas que pactaron sus victorias electorales con criminales locales.
«Ese sofisticado operativo de asesinato les habla a todos, advirtiéndoles que los compromisos se respetan, o habrán consecuencias, como todo en la vida. Es el asesinato de dos personas inopinadamente convertidas en símbolos de todos esos morenistas que pactaron con los criminales, pensando que nunca llegará la hora de pagar. Pues están advertidos: ya llegó la hora del cobro de facturas, cortesía de las presiones de Estados Unidos.
«La descomposición política, social, criminal y económica de México está llegando rápidamente a un punto de ebullición. El signo de los tiempos es la conflictividad de todos contra todos».
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